Hay ciertas cosas que te ayudan a determinar cuál es el mejor doctor para ti. Si te gusta un médico cálido que te dedique tiempo en vez de pasársela pegado a la computadora. Si te gusta un médico autoritario que toma las decisiones por ti, o una que comparte la información y junto contigo toma las decisiones. Este spot se trata de cómo tú puedes ser un mejor paciente, independientemente del médico al que visites. Se logra, preparando tu visita al doctor…
Comparte con tu médico la razón de tu visita y tus síntomas. Obviamente hay visitas al doctor para chequeos anuales. Pero podría haber cosas que te preocupan que si no las compartes con tu doctor o doctora, él o ella no podrán ayudarte a que los resuelvas.
Es importante que le digas a tu médico si fumas o no (incluyendo marihuana), si tomas bebidas alcohólicas y cuánto, si usas drogas. Es importante que le digas si no has estado tomando tus medicinas regularmente, si has estado comiendo comida chatarra y si no has hecho ejercicio.
Vale la pena anotar algunos puntos importantes que te recomiende tu médico. Los estudios demuestran que los pacientes con frecuencia se olvidan de mucha de la información que les proporciona el médico durante la visita tan pronto salen.
Ir acompañado es especialmente importante si esperas recibir noticias que podrían ser difíciles (por ejemplo, que pueda tratarse de un cáncer) o que tengas dudas de que no vayas a entender bien o que no vayas a recordar los detalles. Mucha gente deja de oír lo que el doctor dice una vez que le dicen que tiene cáncer.
Si tienes dudas, haz preguntas. Que no te de pena. Se trata de tu salud y es importante que entiendas qué tienes y si te recetan algo, para qué es, cuánto tiempo lo tienes que tomar, si tiene efectos secundarios, cuáles son, cuánto tiempo lo deberás tomar, cuando debes regresar a la siguiente visita y cuál es el pronóstico de lo que tienes.
Es común estar nerviosos cuando se va al médico porque frecuentemente la persona se preocupa que el doctor vaya a encontrar “algo malo”. Pero, la mayoría de las veces, es para chequeos, para prevenir problemas, para el seguimiento de condiciones conocidas y no tiene que ser doloroso ni una experiencia negativa. Por el contrario, puede ser una experiencia positiva.